Restauración del Huáscar en Chile despues de Angamos

Restauración 1951 y 1952:

Después de haber salido del servicio, el Monitor Huáscar permaneció anclado frente a la actual Comandancia en Jefe de la Segunda Naval, siendo sometido a pequeñas reparaciones que le permitían mantenerse a flote. En 1935, fue pintado de gris y amarillo y se instalaron cuatro cañones de saludo en los alerones del puente y se iza la insignia del Comandante en Jefe, la cual permanece hasta nuestros días. Desde ese año es abierto para ser visitado por el público en general. Estas reparaciones fueron la primera materialización de la idea de erigir un santuario a las Glorias de Chile y Perú, ya que anteriormente, en 1924, se proyectó una colecta nacional para proceder a su completa Restauración, pero por diversas razones económicas y políticas, no se concretó el proyecto de restauración.

 

Huáscar en el puerto de Valparaíso, después del combate de Angamos

 

Entre 1951 y 1952, gracias a la iniciativa, perseverancia y empuje del Comandante en Jefe de la Segunda Zona Naval, el Contralmirante Pedro Espina Ritchie, se inicia la total restauración del Monitor Huáscar, con la intención de dejarlo tal como lucía en 1878, y que se convirtiera en un santuario en que se veneraran las Glorias Navales de Chile y Perú. La labor se vio facilitada al encontrarse numerosos objetos, muebles, accesorios, etc., que se hallaban en perfecto estado de conservación en los Almacenes del Arsenal Naval de Talcahuano. A este hallazgo se sumaron un sinnúmero de personas e instituciones de la provincia de Concepción que cooperan con esta labor de restauración, aportando reliquias, cuadros de héroes navales de los Combate de Iquique, Angamos, Punta Gruesa y del bombardeo de Arica. También los medios de comunicación de la zona impulsaron vivamente la iniciativa emprendida por el Vicealmirante Pedro Espina.  La restauración se realiza pensando siempre en las glorias vividas, es así como en la Cámara del Comandante se instalan los retratos de Prat, Grau y Thomson, tres Comandantes que murieron a bordo del Huáscar.

En la que fuera departamento de Máquinas y Calderas se instala una galería de retratos y un Oratorio debidamente autorizado por el Arzobispo de Concepción, Monseñor Alfredo Silva Santiago, dándose de esta manera un especial y perecedero espíritu de ser un lugar de honra y veneración a quienes ofrendaron su vida por la Patria, y no un simple trofeo de guerra.

 

Desmantelamiento torre de cañones

La restauración de las cubiertas y casco estuvo centrada en la instalación de cúpulas de bronce que marcan el lugar donde murieron o donde se homenajean los distintos héroes, como así mismo se marcaron con placas de bronce los lugares donde fue impactado el Huáscar por el fuego enemigo, ya sea chileno o peruano.

El 8 de octubre de 1952, fecha conmemorativa del Combate de Angamos, fue oficialmente inaugurada la restauración del Monitor Huáscar, convertido en un santuario de las Glorias Navales de las Armadas de Chile y Perú. Esta ceremonia tuvo especial significado por la presencia de altas autoridades navales, civiles y de descendientes de Arturo Prat, y por la solemne misa oficiada por el Arzobispo de Concepción.

Restauración de 1971- 1972:

A casi veinte años de la encomiable labor desarrollado por el Vicealmirante Pedro Espina, el monitor Huáscar necesitaba de urgentes reparaciones en su casco y estructura, puesto que el tiempo estaba causando serios daños, los que debían ser subsanados a la brevedad si se quería mantener a flote a esta reliquia naval. El entonces Comandante en Jefe de la Segunda Zona Naval, Contraalmirante Carlos Chubretovich, decide emprender la segunda etapa de la restauración.

Las labores estuvieron a cargo de ASMAR Talcahuano y dirigidas personalmente por su Director, el Capitán de Navío Gerald Wood. El Monitor Huáscar fue entrado a uno de los diques secos de Talcahuano y su casco totalmente refaccionado, como así mismo se reconstituyó toda su maquinaria, para que pudiera ser observada por los visitantes. Por otra parte se restauraron la torre de Coles y sus cañones, quedando en iguales condiciones a los originales de 1882.

Desde esa fecha el Monitor Huáscar sigue un estricto programa de mantención, lo que asegura su conservación por muchos años más, para que pueda continuar siendo no sólo una reliquia sino el santuario a las Glorias Navales de Chile y Perú.

 

Huáscar en la actualidad

 

Fuente:

huascar.cl